Las XXVII Jornadas Internacionales de Patrimonio Industrial INCUNA 2025 y el XV Congreso de la SEHCYT concluyeron el sábado 21 de junio con tres itinerarios por el patrimonio industrial, cultural y natural de Asturias. Uno de ellos fue por la comarca de la sidra. Esta excursión demostró el interés que despiertan las propuestas de INCUNA entre sus participantes.
La jornada comenzó con una visita al Museo del Jurásico de Asturias (MUJA), en Colunga, donde los asistentes disfrutaron de una magnífica panorámica sobre la historia geológica y paleontológica del territorio asturiano. El propio entorno natural del museo, con vistas a los acantilados y al mar Cantábrico, permitió a muchos participantes descubrir una faceta menos conocida pero igualmente relevante del patrimonio científico del Principado.
Tras la visita, se realizó un paseo por la costa en las inmediaciones del museo, donde pudieron contemplarse huellas fosilizadas de dinosaurios impresas en las rocas de las playas. Este contacto directo con la paleontología y el paisaje costero fue uno de los momentos más emocionantes de la jornada, despertando gran interés y admiración.
A continuación, el grupo se desplazó hasta el casco histórico de Villaviciosa para realizar una visita guiada que incluyó su plaza mayor, iglesias y arquitectura tradicional, en un recorrido que evidenció el rico pasado comercial e industrial de la villa.
La parada gastronómica tuvo lugar en un restaurante tradicional ubicado en un llagar de sidra, donde los congresistas degustaron productos típicos de la región, y, por supuesto, sidra natural escanciada. Esta experiencia fue especialmente valorada por los participantes internacionales, que destacaron la hospitalidad asturiana y la excelente calidad de la gastronomía local.
Por la tarde, se realizó una visita guiada a la histórica fábrica de sidra El Gaitero, emblema del patrimonio industrial vivo de Asturias. Fundada en 1890, la empresa continúa siendo un referente de la industria alimentaria del norte de España. A lo largo del recorrido, los asistentes conocieron su historia, sus antiguas instalaciones —convertidas hoy en museo— y el proceso de producción, embotellado y exportación de la sidra. Esta visita despertó especial admiración por el equilibrio entre tradición y modernidad, así como por la conservación del legado industrial en funcionamiento.
El itinerario fue valorado como “inolvidable”. Varios participantes, tanto nacionales como extranjeros, expresaron su intención de volver a Asturias y seguir participando en futuras ediciones de las Jornadas INCUNA. “Un día perfecto que resume todo lo que son estas jornadas: conocimiento, paisaje, patrimonio y emoción compartida”, comentó una congresista procedente de Italia.
Con esta propuesta, INCUNA volvió a demostrar su capacidad para articular ciencia, cultura y territorio en una experiencia enriquecedora y cercana, consolidando su papel como entidad de referencia en la divulgación y activación del patrimonio industrial, cultural, científico y técnico.

